Pensamientos, palabras, obras y omisiones

Pensamientos, palabras, obras y omisiones
Pensamientos, palabras, obras y omisiones, … tal cual es la vida.

domingo, 19 de febrero de 2017

La Rueda de la Fortuna - Arcano Mayor


Este Arcano Mayor, La Rueda de la Fortuna, me da la sensación de movimiento y de actividad y además hay mucho personaje. Recuerdo que significa que las cosas cambian o que se mueven ... la he elegido al azar en un momento en el que he tenido que tomar una decisión importante y que me está ocasionado un movimiento interior y exterior. ¿Casualidad? Leeré ahora sobre La Rueda de la Fortuna, a ver que me enseña.


Pues efectivamente, es una carta que indica rapidez, movimiento y nuevas situaciones que acontecen o que hacemos que acontezcan con nuestras decisiones y serán un punto de inflexión en la vida. Aunque es cierto que indica que son circunstancias en las que poco podemos hacer, que está más en otras manos que en las nuestras.

En principio la Rueda de la Fortuna sigue girando y en este girar mueve a personas y situaciones que será beneficioso porque ahora hay estancamiento. Eso sí, a aquellos que les obliga a dar ese cambio necesario, quizás no quieran y se les haga duro.

Este Arcano Mayor nos recuerda que nada es permanente, ni lo "malo" ni lo "bueno"; hoy estás arriba de la rueda y mañana estás abajo no siendo mejor ni peor, tan solo lo que es. Nos indica que el ciclo de la vida está presente y con él los cambios y vueltas que sean necesarios para la evolución que nos lleva al equilibrio vital.

Cuando todo esté suave y tranquilo agradece la vivencia y aprovéchala disfrutando totalmente del momento, sabiendo que vendrán otros quizás más duros de llevar, pero igual de motivadores para el crecimiento de vida. Las crisis son oportunidades y como tal hay que verlas.
Y aunque, cómo he dicho antes, no está en nuestras manos este giro de tuerca en las circunstancias, si que podemos con nuestra actitud ante ellas, dar nuestro impulso más positivo o más negativo.
Puede ser también que ya tengamos ese estupendo punto de equilibrio vital y que las circunstancias que van aconteciéndonos no lo alteren como para volver al descenso en La Rueda de la Fortuna.

Hay otro matiz importante en la carta, el de que tengamos en cuenta que las situaciones cambian y en las nuevas hay un componente de recolección de lo que hemos sembrado antes: lo definen como karma.
Yo esta apreciación prefiero verla más cómo una consecuencia natural que cómo el mal entendido sentido karmático. Si siembras lechugas lo suyo es recoger lechugas y no patatas, no hay castigo porque te salgan lechugas.
Es sencillo y fácil de ver y nada mágico o ilógico. Quitemos pues ese componente de castigo o culpa y mejor pongamos el térmimo consecuencia, resultado, fruto, secuela... con estos nos hacemos responsables de nuestra vida.

Si pones un peral, te dará peras.
Si tu ves con gafas sucias el mundo, el mundo estará sucio.
Si piensas con rencor, vivirás rencor.
Si tú sientes la soledad como un castigo, intentarás huir de la soledad con su bienestar y reconocimiento de uno mismo que aporta.
Si das amor, recibirás amor.
Si das mentira y dolor, lo mismo recibirás.
Si comprendes, te comprendes.
Si das, te dan.
Hay que aceptar la parte de responsabilidad en las situaciones que vivimos y pensar que no ocurren todas por "casualidad" y las que ocurren, son para que aprendamos y veamos otras maneras u otras posibilidades de existir. Cuándo somos capaces de aceptar esto, la colocación de las piezas en el puzle de la vida va resultándonos más fácil y beneficiosa.


A La Rueda de la Fortuna se la puede conocer también cómo rueda del Destino, Rueda del Tiempo o Rueda de la Vida y en la carta aparecen varias figuras; dependiendo del tipo de Tarot son diferentes.
En el Tarot de Marsella hay tres animales algo humanizados difíciles de distinguir (para alguno son monos, otros conejo el que sube, mono el que baja); uno está subiendo por la rueda otro arriba de ella y un último que está descendiendo por ella.
En la versión Rider-Waite hay que añadir un león, un toro, un hombre y un águila con cuerpo alado y un libro abierto que dicen que representan a los cuatro evangelistas. Subiendo se encuentra el Dios Anubis y bajando en figura de serpiente el Dios Tifón, mientras que encima de la rueda está la Esfinge.

Es la rueda de la eternidad, de lo que nunca acaba, la vida constante, contínua y eterna con sus momentos álgidos e incluso apoteósicos y sus momentos de descender al inframundo. Sus momentos en los que llevamos nuestra vida por el camino de nuestra mejora y beneficio y con sus otras épocas por caminos en los que nos dejamos llevar sin pensar dónde van.
Aunque existe un tercer personaje con protagonismo en la rueda de este Arcano Mayor.
La figura que vemos sobre la rueda simboliza a aquellos que han sabido colocarse en el punto medio dominando el equilibrio de la misma, el equilibrio de la vida.
También existe en algunas versiones de Tarot una manivela en la rueda que viene a simbolizar que la mueve el destino

La Rueda de la Fortuna nos comunica que se aproxima un momento de cambio del cuál siempre saldremos beneficiados, eso sí, puede ser de una manera fácil (subiendo por la rueda) o de manera más complicada (descendiendo). Sea como sea, el cambio va a existir queramos o no, así que lo mejor es plantearse la aceptación a la nueva situación con alegría y confianza en lo bueno que trae todo cambio y su crisis existencial que conlleva.
Es un momento de oportunidades si las sabemos apreciar dentro del caos que ocasionan los cambios, es ese punto de inflexión que nos va a poner delante lo que haga falta para dar el cambio necesario y oportuno para modificar lo que no funciona.

Este Arcano Mayor está asociado a los encuentros y las oportunidades, la "suerte" o las "coincidencias", las sorpresas y los nuevos ciclos que nos van a permitir ese cambio imprescindible en nuestras vidas (puede ser una persona con la que relacionarse, un trabajo diferente, la lotería...).
Nos dice que va a venir lo que necesitamos y no lo que queremos para nuestro bien, para seguir adelante de una manera mejor que quizás desconozcamos. Ante esto sólo nos queda estar preparados y con apertura de mente por lo novedoso que la situación nos traiga.
Así que valora lo que tienes, ten confianza y cree en el amor incondicional que mueve para tu fortuna la rueda de tu vida. Aunque te traiga situaciones inestables, ten fe porque estarán llenas de oportunidades y sorpresas de una forma rápida y beneficiosa.

Algunas de las palabras que definen a este Arcano Mayor son: fortuna, resolución, avance, cambio, destino, camino, rumbo, ineludible, necesario, forzoso, inexcusable, impostergable, conclusión, resultado... piensa en ellas y practica la aceptación sintiéndote tranquilo.

Abraza con optimismo el cambio, déjate sorprender por la vida, sigue sin miedos los nuevos caminos que se te abren y vive agradecido con lo que tienes, porque esto es La Rueda de la Fortuna: una nueva dimensión de tu vida, un nuevo paradigma por el que moverte para tu bienestar y tu crecimiento personal y espiritual ¡Da la bienvenida a lo nuevo!
Poesía sobre La Rueda de la Fortuna

martes, 14 de febrero de 2017

La Emperatriz

¡Me gusta este Arcano Mayor! La Emperatriz, quizás por esos recuerdos de pequeña de las películas de Sisi o porque la palabra me parece muy sonora o porque tengo en el recuerdo que es una carta que nos habla de una persona pasional, emocional y creativa que me da buenas sensaciones. Una mujer con su feminidad por bandera 
¡A ver qué más descubro de ella!

Tiene el significado de la abundancia, la naturaleza fértil, la sensualidad, la belleza, el amor y la parte femenina que todos tenemos (hombres y mujeres).
Esa parte que va a ser buscada por los demás para pedir consejo o el hombro donde apoyarse y si es necesario llorar, pero que no conllevará una carga si no todo lo contrario. Son situaciones espejo para verse en todo lo que se vale y cuesta reconocerse (somos amor). 
Es decir, a través de personas y acontecimientos podremos conseguir vernos con la grandeza que nos aprecian los demás, valorando esas cualidades y facultades que nos han hecho llegar a la sabiduría y a poder aportar mucho a quienes nos rodean, a nosotros mismos y en definitiva al mundo.

Es un Arcano relacionado totalmente con los afectos y las emociones, con todo lo que a través del tiempo nos han aportado ; experiencias personales que nos han dado un crecimiento afectivo y emocional que debe ser compartido para beneficio de todos. Crecimiento emocional y afectivo necesario para reaprender o redescubrir el verdadero yo que somos cuando nos quitamos las barreras y dejamos hablar a nuestro ser amoroso.

Dejemos pues que esa sabiduría interior descubierta con los años nos guíe hacia la dicha y la felicidad, porque ese es el camino que tenemos que seguir y de seguro, hay gente que nos seguirá en él y personas a las que nosotros seguir.
Hay seres llenos de encanto por el mundo y es un lujo cruzarnos con alguna persona que es feliz y dichosa a pesar de las circunstancias momentáneas que la puedan acontecer. Personas con la impronta de La Emperatriz benévola, creadora, abundante y llena de afecto para compartir con todo el mundo.
Yo a este tipo de personas las califico cómo "gente bella".

Con estas personas se entablan relaciones profundas e íntimas, con mucha armonía y de una sensualidad brillante que perdurarán en el tiempo, relaciones basadas en el amor. Nos aportarán ese punto de amabilidad, generosidad y ternura tan necesario para calmar el ego guerrero. 

La carga de amor incondicional que lleva este Arcano Mayor es contagiosa y beneficiosa, de ahí que cuando topamos con La Emperatriz, no queda más que estar a la altura y utilizar la nuestra. A través de sus cualidades encontraremos la calma, la armonía y la alegría de vivir que tenemos todos dentro.

Esta carta nos indica que debemos dar importancia a eso que llamamos intuición y a que debemos hacerla caso (intuición o ser interior o superior o la parte eterna,... hay maneras diferentes de definir quiénes somos). 
Para ello, además de dedicarnos a los demás, debemos preservar momentos de estar con nosotros mismos y escucharnos. Dedicar tiempo a nuestra propia compañía para sentirnos (es un gesto de amor propio la soledad querida), porque esa voz interior nos va a saber decir las cosas muy claras y de forma acertada.
Se impone el estar al tanto de esos mensajes interiores que pueden venir bien a través de la contemplación/meditación, de leer en un libro algo con lo que nos sentimos identificados o de escuchar a alguien y sentir que eso es lo que nosotros somos. Estar atentos a las señales de vida que están por todos lados, sabiendo que nuestro interior las sabe detectar y que nuestra mente no nos las deja discernir.

Vamos a dejarnos redescubrir a través de la emoción, del afecto y del amor. Vamos a dejarnos descubrir todo lo que nos rodea con su amabilidad y dulzura, que es mucho más abundante que lo que esta sociedad con los medios de comunicación nos quieren hacer creer. 
Respirar lo amable, lo dulce y lo sensual de lo que estamos hechos; descubrirse los unos a los otros en el afecto sin miedo, porque sólo puede traer bueno y abundante.

La alegría y la felicidad nos piden que las vivamos, al igual que los sentimientos y las emociones nos dicen que las dejemos asomarse para que las demos el lugar que merecen en nuestras vidas. Valoremos vivir demostrando el afecto del que estamos hechos, demostrando el amor de dónde venimos y al que aspiramos volver.

Eso es La Emperatriz, es el Arcano del amor, del afecto, de la fertilidad, la abundancia y la creatividad, por lo que no se nos olvide favorecernos de sus cualidades.
Para ello basta vernos con esos dones en nosotros, que seguro que en muchos momentos los hemos vivido y también seguro que en muchos de ellos no hemos sabido distinguir esos atributos cómo una cualidad intrínseca.
Este es el momento de ver nuestro gran amor incondicional a nosotros y hacia los demás. Recuerda que eres amor y que tienes afecto y emociones para vivirlas y compartirlas.
La madre naturaleza es abundancia continua y fertilidad continua, no tiene que cambiar nada porque así se desarrolla. Con nosotros pasa lo mismo si vemos el mensaje de La Emperatriz.
No tenemos que cambiar nada en los otros o en nosotros; debemos amarnos y descubrir lo que somos y eso es el amor perfecto e incondicional cuyo único anhelo es amar y sentir.

Brinda una mirada, un abrazo o unas palabras cariñosas a quien quieres. Hoy en día es fácil con todas las herramientas de las que disponemos para comunicarnos (whasapp, twitter, facebook, móvil...). Quizás no sea "casualidad" que me salga La Emperatriz en un día como hoy que es el día del amor y de la amistad (14 de febrero, San Valentín).

Pasar por la vida sin querer vivir nuestra parte afectiva es como no dejar que unas semillas crezcan, cómo no permitir que un niño juegue, se ría y llore, salte o se exprese. La espontaneidad que nos aportan los sentimientos y las emociones reconocidas que este Arcano Mayor nos dice que tenemos, nos aportan lo necesario para ser felices.

El amor lo es todo, aunque este teatro en el que estamos nos haga entender de manera coartada lo que es el amor incondicional e incluso nos sugiera que hay que prescindir de él para ser alguien (esto ha ocurrido en tiempos pasados y en la actualidad). No dejes que tu vida se mueva sin todo el amor que mereces y eres. No te quepa duda que a través de él conseguirás muchas más satisfacciones que desencuentros; "no dudes del poder del amor".

Para que se nos quede bien grabado el significado de esta beneficiosa carta, voy a poner una serie de adjetivos que referencia La Emperatriz y te propongo un juego: con cada uno busca un momento o una circunstancia en la que lo hayas vivido, bien por tu parte o por parte de alguien. 
Recuerda cómo te sentías al vivirlo o al observarlo y vuelve a esa sensación cada vez que dejes de creer en ti (tu intuición o ser interior) o en el amor incondicional que somos.

Los adjetivos que describen a nuestra bella persona, La Emperatriz, son: 
amable, cordial, cariñosa, dulce, encantadora, bondadosa, acogedora, creadora, empática, afectiva, emotiva, compasiva, benigna, tierna, sensible, generosa, atenta, indulgente, afable, humanitaria, expresiva, acariciadora, amante, romántica, efusiva, amorosa, agradable, maternal, solícita, entrañable, cálida, comunicativa, dadivosa, amistosa, accesible, comprensiva, solidaria, simpática, adorable, sociable, considerada,  jovial, alegre, feliz, amena, placentera, ... creo que con estos es suficiente para que nos reconozcamos en muchos de ellos y nos creamos que eso somos y eso tenemos que vivir.

Otro Arcano Mayor más que me encanta por lo que representa; en verdad La Emperatriz está llena de vida y de amor por lo que es una excepcional dadora de vida y amor ¡La pienso potenciar y aprovechar un poco más!
Poesía sobre La Emperatriz 

Si te ha gustado cómo he tratado al Arcano Mayor La Emperatriz, busca a otros Arcanos.

martes, 7 de febrero de 2017

El Loco del Tarot

Este Arcano Mayor que he escogido al azar entre todos me hace gracia; le veo tan libre y feliz mirando hacia el cielo que me gusta esa imagen alegre. En la baraja que tengo yo, lo único que me da por pensar es que está al borde de un precipicio o algo parecido y no parece enterarse. A ver que me ocurre al investigar a El Loco.

De entrada leo que no tiene número y que significa que no pertenece a este mundo y que vive al margen de él ¡Mira que majo! porque para mí es lo mejor que se puede hacer en esta sociedad de locos (me da por pensar que el cuerdo es él). Está fuera de todo convencionalismo y del protocolo social.

Representa la aventura y la valentía de ir hacia lo desconocido dejando su zona de confort. Es la espontaneidad, el espíritu libre e incluso con la inocencia que no ha perdido aún.
Es el empezar un camino nuevo con el corazón abierto y sin dobles vueltas, es decir, transparente y lleno de energía.

Explorar los caminos, las alternativas diversas de una manera muy libre y sin ataduras, sin los miedos sociales en los que nos hacen vivir (algo que muchos no logran entender). La alegría y la confianza en uno mismo sin la preocupación por lo económico porque se sabe capaz y que tendrá siempre lo que le haga falta. Lleva una vida sencilla sin grandes pertenencias y sin grandes gastos que le permite ser feliz.

Avanza con nuevas ideas y propuestas de vida (en cualquier plano) y aunque seguro que se encuentra con gente que no ve más allá de sus convencionalismos, él seguirá con ellas. Su energía y su visión diferente llena de ganas de aprender jugando con la ingenuidad de un niño, hay que guiarla en vez de reprimirla.

Esta carta nos indica acción y dinamismo, el no quedarse en donde uno está y dar el paso que nos deje aprender mundos y maneras diferentes para vivir. Explorar y vivir la vida como una aventura y un juego, con el ser limpio y honesto con uno mismo.

Encarna la libertad de vivir con pocas necesidades y disfrutando del momento presente, sin gran carga del pasado y sin el miedo por llegar con mucho al futuro. No lleva compromisos y al ir solo puede permitirse aprender de sus errores con alegría, ya que la risa es una de sus herramientas y sabedor de que los acontecimientos son lo que tienen que ser para una mayor sabiduría y en su beneficio (se siente respaldado por La Vida, El Universo,...).

El Loco es como que nos dice que nos atrevamos, que conozcamos personas y maneras de vivir diferente. Que abramos la mente y aceptemos nuevas formas de pensar y de sentir la vida y vayamos a la acción; eso de quedarse en el mismo sitio y confortablemente conocido nos traerá más de lo mismo.
Fuera miedos porque la vida nos protege si llevamos una vida sencilla y con interés por todo y por todos.

Es la alegría por emprender hacia algo diferente, la ilusión por conocer que nos trae el nuevo día, la felicidad de vivir cada persona y cada circunstancia.

En cuanto a la simbología de este Arcano Mayor, nos dice que es una persona joven que camina hacia delante con un bastón cómo apoyo (voluntad e ilusión) y su fardo a cuestas con lo que tiene (su experiencia, quien es).   Un animal a su lado (para unos un perro, para otros un lobo) que le acompaña y le cuidará en algunas circunstancias. El sol nos dice que es el comienzo del viaje y la rosa al ser blanca representa la inocencia.
En varios sitios he leído que es la carta primera del Tarot y que indica que se deja el mundo espiritual (las montañas) para bajar al mundo material a recorrerlo (baja el acantilado).

Al llevar el 0 como número algunos lo identifican cómo el principio de algo nuevo y los que lo colocan al final de todos los Arcanos Mayores, cómo el fin de una etapa para empezar otra. En cualquier caso, está definida como una carta poderosa por todos los que entienden del Tarot porque con su libre albedrío puede conseguir todo aquello que con su imaginación, espontaneidad y naturalidad quiera vivir.

Yo ahora que me estoy metiendo a entender dos líneas diferentes de conocimiento, los Arcanos Mayores y El Eneagrama, en mi inmensa ignorancia yo veo a El Loco cómo el Eneatipo 7- El Entusiasta.

Lo que yo he entendido de El Loco, es que es un personaje sin miedos, sin condicionantes sociales que busca vivir alegre las experiencias que la vida le va poniendo, sin mirar al pasado ni al futuro. El presente es su meta; disfrutar de lo que le viene, no querer más de lo que pueda llevar encima (en su petate), no importándole el qué dirán y viajar con la energía y el ímpetu (el bastón) de los niños cuando empiezan a descubrir el mundo, con la inocencia que les caracteriza (la rosa blanca) y esa capacidad de sorprenderse y reírse de muchas cosas, algo que vamos perdiendo con la edad.

Es un empezar de nuevo, un experimentar y aprender de lo que va ocurriendo; todo esto con la presencia de la protección de su ser interior (el perro que le acompaña en la carta) que le para cuando meterse en alguna situación le puede traer alguna consecuencia y con la ayuda de su ilusión y energía (el bastón en el que se apoya) ¡Tiene todo por delante para vivir!

La verdad es que a mí me gusta este joven/niño/adulto que es El Loco con sus locuras a cuestas, aunque para muchos sea ilusorio y poco realista, inconsciente y con una inocencia no acorde con los tiempos que vivimos. Definitivamente en él se puede aplicar la expresión "carpe diem".
Poesía sobre la figura de El Loco 

lunes, 6 de febrero de 2017

Eneatipo 7, El Entusiasta

Vamos a ver qué tal es este eneatipo 7, el Estusiasta. En principio tiene pinta de ser simpático y seguro que también divertido; alguien que es capaz de vivir entusiasmado seduce, aunque, ¿es realmente así?

El 7 se entusiasma con aquello que consigue llamar su atención (muchas cosas le seducen) y son curiosos además de gustarles la aventura y el riesgo. Van a por aquello que quieren con un cierto descaro.

Está dentro de la triada del sentimientoaunque tiendan a ser muy prácticos y estén dedicados a unos cuantos proyectos a la vez. Son capaces de tener ideas al momento y les gusta aquello que les mueva a pensar, lo que a su vez les hace atraer momentos o proyectos que les llevan a volver a estar activos mentalmente.

Aunque son inteligentes y ocurrentes, no soy por naturaleza estudiosos ni intelectuales ya que les gusta más ser espontáneos y con una visión global de las situaciones, con una enorme capacidad de sintetizar lo que aprenden o perciben. Eso sí, les gusta la emoción que les genera la novedad y la creatividad de sus ideas más que ponerlas en práctica.

No sólo tienen una gran agilidad mental, también destreza manual y pueden aprender muy rápido, lo mismo idiomas cómo jugar al tenis por la coordinación entre cuerpo y mente que poseen. Esto que en principio parece una capacidad, les puede generar el problema de no saber que elegir o por qué decidirse, ya que todo les gusta. Eso sí, cuando están en su aspecto sano, les lleva a obtener grandes logros de vida.

Esto de estar dispersos es común en la triada a la que pertenece ya que suelen estar desconectados de su naturaleza o guía interior, creándoles la ansiedad de creer que no toman buenas decisiones ni para ellos ni para nadie. 
Esto es lo que les mueve a estar con muchos proyectos e ilusiones en la cabeza; de esta manera no piensan en la ansiedad y apartan los sentimientos negativos que no les gusta nada experimentar.

Pasan de una idea a otra, de una experiencia a otra experimentando con el método ensayo error; prefieren experimentar para saber qué es lo mejor o lo peor, en el fondo con la creencia de que no encontrarán lo que están buscando de verdad en la vida. Esto les sucede hasta tal punto que pueden remplazar lo que realmente les gusta por cualquier cosa que les estimule en esos momentos.

Sienten que si eligen una cosa se pierden otra porque realmente no han ahondado en su interior para saber qué es lo que son y quieren. Esas prisas por experimentar de todo para dar con lo que quieren les lleva a elegir desacertadamente, lo que les provoca acabar frustrados y enfadados, hasta con menos recursos emocionales, físicos e inclusive económicos, en muchos casos arruinando buenas relaciones, su salud y su patrimonio en busca de esa tan ansiada felicidad.

Todo lo anterior dicho, no quita para que sean personas muy optimistas, desbordadas y animosas con una gran vitalidad y deseosos de vivir su día a día con intensidad y sin tomarse nada demasiado en serio. Ser tan animados hace que a los demás les guste estar con ellos, por lo que son el centro de atención.
El problema surge en la franja media o menos sana, que se obligan a estar siempre estimuladores para los demás, algo que es pesado a la larga. Si los que le rodean no siguen su ritmo trepidante, se sienten como abandonados o rechazados, algo que les enfada y frustra, con lo que van a buscar otras gentes o situaciones en las que tampoco se verán satisfechos (pasará lo mismo).
Y aquí pongo una cita muy buena del libro La sabiduría del Eneagrama, “La vida es una progresión de deseo en deseo, no de gozo en gozo. Samuel Johnson.

En su aspecto sano, el eneatipo 7 desprende vida y entusiasmo contagioso evidenciando en su entorno el privilegio de sentirse vivo.

Si vemos de dónde vienen, en su infancia pudiera ser que se sintieron desconectados de la figura de sustentación (normalmente la madre), causa de su frustración y que debido a su gran sensibilidad, deciden reaccionar cuidándose de ellos mismos de manera inconsciente.

Puede ser que realmente si estuvieran con esa figura sustentadora, pero que por algún motivo estuvo ausente (nacimiento de otro hermano, muchas horas de trabajo de la madre, o una enfermedad que la ausentó, o enfermedad del propio niño que le tuvo hospitalizado...). Incluso puede ser que en la etapa de separación en su propio proceso evolutivo natural, él no se adaptara y buscara cosas alrededor que le dejaran sobrellevar la situación de mejor manera; es decir, buscaba sustituciones que le distrajeran para soportar la angustia que les embargaba (en psicología se le denomina buscar objetos de transición).

Cuando crecen parece que siguen con esa dinámica de buscar ideas, objetos, personas o situaciones de transición para así reprimir la sensación de frustración o dolor. Si no consigue algo que les entretenga entran en conflicto emocional, lo que les lleva a buscar cualquier cosa que les distraiga para no pensar en ello.

Si fue muy intensa de niño esa sensación de dolor, miedo o angustia y frustración por la separación de la figura sustentadora, de mayores tienden a tener más necesidad de ocupar su mente con actividades y personas diferentes.

En su franja sana son sensibles, extrovertidos y espontáneos con ilusión por las
experiencias, expresando alegría inmediata ante lo que les gusta (que es casi todo).
Sus muchos intereses le otorga grandes conocimientos en materias muy diferentes y la ilusión le capacita para ser bueno en muchas de ellas siendo muy productivo y creativo.
Los 7 sanos reconocen y agradecen todo lo que viven y a las personas sintiendo intensamente cualquier experiencia con su positivismo y su alegría; se puede decir que muchos momentos se sienten embriagados por la felicidad e ilusión que les provocan muchas experiencias (incluso más allá de las sensaciones físicas).
Se puede decir que viven entusiasmados con su vida y lo que les toque vivir, sabiendo recibir los malos momentos con optimismo y siendo positivos.

En la franja promedio (lo habitual) tienen más necesidad de experimentar novedades y experiencias (los sanos no necesitan, simplemente viven intensamente), por lo que tienden a ser consumistas y no se limitan, es como que todo lo quieren. Esto también les lleva a una desenfrenada actividad de cualquier tipo porque tienen miedo al aburrimiento, aunque les lleva a estar haciendo demasiadas cosas a la vez. Su sensación es que nada les satisface realmente y ante esa necesidad de encontrar aquello que le haga felices se vuelven egoístas, impacientes y exigentes, pretendiendo que los demás cubran esas necesidades que ellos mismos se provocan. Buscan fuera lo que no quieren ver dentro pudiendo llegar incluso a adicciones ya que nada es suficiente.

Y en su franja insana el eneatipo 7 se frustra con mucha facilidad volviéndose abusivos e incluso ultrajantes en cuanto más necesidad tienen de sentirse distraídos. Son impulsivos e inmaduros, pudiendo llegar a ser descontrolados e incluso degenerados (sexualmente pervertidos), con una gran exigencia caprichosa hacia los demás que sienten que les tienen que satisfacer en sus deseos.
Con cambios anímicos impredecibles intentan escapar de sí mismos convirtiendo su vida en una huida continua hacia estímulos externos que cada vez les satisface menos y les lleva a buscar la desmesura acentuada en cada frustración recibida (que suele ser muy a menudo ya que nada les satisface).

Os pongo el resumen que aparece en el libro LA SABIDURIA DEL ENEAGRAMA ( Don Richard Riso & Russ Hudson)

SANO-
Nivel 1 Dichoso, satisfecho
Abandonan la creencia de que necesitan ciertos objetos y experiencias para sentirse satisfechos, y así son capaces de asimilar totalmente sus experiencias y sustentarse con ellas.
Paradójicamente, también logran hacer realidad su deseo básico: estar contentos y felices, satisfacer todas sus necesidades; se vuelven apreciativos, se sienten felices y muy agradecidos.
Nivel 2 Expectante, entusiasta
Centran la atención en el mundo de las posibilidades y les entusiasma pensar en todas las cosas que van a hacer. Imagen propia: «Soy feliz, espontáneo y extrovertido».
Nivel 3 Realista, productivo
Refuerzan su imagen participando plenamente en la vida y haciendo cosas que les garanticen que tendrán lo que necesitan. Su apasionado entusiasmo por la vida se manifiesta en una enorme versatilidad y prolífica producción. Son optimistas y osados, pero también prácticos y hábiles.
MEDIO-
Nivel 4 Codicioso, consumidor
Comienzan a temer que se están perdiendo otras experiencias mejores; se inquietan y se interesan por tener cada vez más opciones. Se mantienen ocupados, haciendo malabarismos con muchos trabajos y planes, en un intento de mantenerse al día de las últimas tendencias,
Nivel 5 Distraído, disperso
El temor a sentirse aburridos o frustrados y a que afloren los sentimientos dolorosos los induce a mantenerse entusiasmados y ocupados. Derrochan energía a su alrededor hablando, bromeando y buscando nuevas aventuras, pero suelen distraerse y desviar la atención.
Nivel 6 Egocéntrico, exagerado
Temen que no habrá suficiente de lo que creen que necesitan, por lo cual se vuelven impacientes y desean gratificación instantánea.
Pueden ser muy exigentes, pero rara vez están satisfechos cuando se satisfacen sus exigencias. Hastiados y derrochadores, son desdeñosos y no aceptan sentirse culpables.
INSANO-
Nivel 7 Insaciable, huidizo
Piensan que sus actos atraen su sufrimiento y su infelicidad, y eso podría ser cierto. Se aterran, y tratan de evitar el dolor a toda costa.
Son muy impulsivos e irresponsables y hacen aquello que les asegure alivio a su ansiedad, pero no encuentran alegría en sus empresas.
Nivel 8 Maniaco (depresivo), desasosegado
Se desesperan tanto por huir de su ansiedad que se descontrolan y expresan desconsideradamente su sufrimiento en lugar de sentirlo. A medida que aumenta su inestabilidad y volubilidad, la actividad histérica alterna con la depresión. Insensibles y desconsiderados, hacen cualquier cosa por librarse del dolor.
Nivel 9 Abrumado, paralizado
Comprender que han arruinado su salud su vida y su capacidad de disfrutar es demasiado para los Siete insanos. Se sienten aterrados y atrapados, y creen que ya no tienen opciones ni formas de escapar al sufrimiento. En muchos casos, estos excesos han llevado a graves problemas económicos y físicos, incluso a dolor crónico.

Voy a matizar un poco más los niveles menos sanos del eneatipo 7, no por sacar trapos sucios, si no para saber cuáles son los puntos de mejora y de crecimiento que el 7 puede identificar para hacer su vida mucho más agradable consigo mismo.

Cuanto mayor es su frustración, mayor es la exigencia con las relaciones, sobre todo las íntimas, a las que sacan todo defectos porque nada les es suficiente ni les satisface, echando la culpa de ello a los demás por no cubrir esas carencias que él siente. Su forma de expresar esta frustración es altiva, despreciativa y cortante.

A su vez también se frustran y se impacientan hasta consigo mismo al ver que no están aprovechando sus propias capacidades y recursos; tienen muchas ideas estupendas que nunca llegar a realizarse. De nuevo en estas situaciones cargan con exigencia hacia los demás y con poca tolerancia a los errores ajenos.

Hay una particularidad del eneatipo 7 insano; procura justificar sus acciones y evitar el sentimiento de culpa para no tener que lamentarse de sus acciones hacia los demás, que pueden ser hirientes y dolorosos, incluso agresivos y muy desagradables.
Aunque la verdad sea dicha; no quieren hacer daño y su defensa para no verse “malos” les impide reconocer el dolor que causan y culpabilizan a los que han padecido su frustración y ansiedad (se vuelven insensibles) en vez de mirarse y analizar el origen de su ansiedad.

¿Cómo puede el 7 disfrutar de su potencial de energía, vida y capacidades? Trabajando su tendencia a evitar sentirse satisfecho con lo que vive, con lo que es y con lo que tiene.

Tienen que agradecer y no creer que hay siempre algo mejor para vivir o para que le solucione sus ansiedades y una de las claves es pensar que si no se es capaz de agradecer y vivir lo que tiene en ese momento (que es lo que ha elegido), difícilmente podrá vivir lo siguiente que le venga sin sentir lo mismo.

Son capaces de estar con su acompañante y andar pendientes de la conversación de al lado, de quién pasa, de a quién saludar, de que ocurre en el otro lado, de… es decir, rozan la mala educación al no estar presentes en la situación y con la persona con la que están, haciendo que en las relaciones más íntimas se den situaciones complejas en las que la inseguridad se instale.

Tanta dispersión conlleva una falta de atención a quien tienen al lado, algo que a la larga trae las consecuencias que está buscando el 7, el no compromiso, el cambio constante y con ello alimentar el sentimiento de insatisfacción que les lleva a necesitar más personas y situaciones que les estimulen.

Este es su gran reto, ser felices y vivir su presente tal y cómo es.

Hay una manera de ir reeducando esta conducta de estar eternamente insatisfecho con lo que se vive y andar buscando otras experiencias.
Elegir una actividad en centrarse en ella, cuando notes que te vas de ella, volver a centrarte en lo que estás haciendo sin sentir culpabilidades por haberte dispersado. Tan sólo observa que es lo que te distrae y de ahí aprenderás sobre ti mismo (la familia, una ilusión, el hambre, cansancio, tensión,...).

También elige un regalo o algo que tengas o una persona y piensa en todas las gratificaciones que esa persona u objetos te ofrecen. Deja de lado lo que tú piensas que no tienen y céntrate en lo que te aportan en la vida.
Cada vez que te descubras pensando en la carencia, cambia el pensamiento a lo que de verdad tienen.

Otra manera de controlar la frustración es tomando consciencia de cuando no se encuentran bien y respirar profundo parándose a ver que les lleva a no encontrarse a gusto, que es lo que están sintiendo en ese momento.

Algo que pueden ejercitar los eneatipo 7 cuando empiezan a adquirir conciencia de sus actos y que les va a reportar grandes satisfacciones y hará disminuir su sufrimiento interior y su ansiedad, es el acto de pedir perdón a aquellos que sabe que su frustración les ha hecho daño.
Quedar con la persona afectada, hacer reconocimiento sincero, pedir disculpas y dejar que la otra parte exprese lo que necesite decir, es uno de los actos más sanos que puede realizar para sí mismos y para la otra parte (aunque esta sepa que la intención del 7 no era hacerlas daño, lo padecieron).  Muchas relaciones se sanan con este acto.

Sigo ahora con la valoración de cómo es el eneatipo 7 con respecto a cómo se pueden comportar dependiendo de las variantes instintivas (he escrito sobre ello )

El 7 conservación. Enérgicos y dispuestos a conseguir cubrir sus necesidades y vivir cómodos. Ambicioso y trabajador incansable para conseguir lo material, convirtiéndose en grandes consumidores estando pendientes de las compras "chollo" y mirando precios y ofertas de posibles fuentes de satisfacción.

Si les gusta estar con gente, pero no quieren depender ni que dependan de él y si no están en la franja sana, se pueden agobiar y producirse angustia si no satisfacen sus necesidades o pierden seguridad económica. Si esto les hace sentirse frustrados se vuelven maniáticos y exigentes con los demás ya que esperan que les cubran sus necesidades ayer mejor que hoy.

Si ya nos encontramos con un 7 conservación insano, puede que topemos con alguien duro, desconsiderado e incluso agresivo con tal de conseguir calmar su ansiedad y cubrir su sensación de inseguridad. Este tipo de 7 es imprudente y derrochador con sus recursos y dedicando su energía, emoción y economía a los placeres mundanos. Su frase es "quiero lo mío"

El 7 social. Aquí se trata de no perderse nada, aliándose con sus gentes que compartan sus intereses, ya que le ofrecen la variedad de alternativas que necesitan para sentirse bien.
Tienen ese punto idealista por el cual se comprometen en causas sociales, pero como estas no vayan al ritmo rápido que él necesita, se cansan y tienen el conflicto entre terminar con su compromiso o dejarlo (lo que ocurre en los más insanos)

En su afán de buscar siempre algo mejor y más estimulante, todo aquello que les limite no lo llevan bien. Su agenda la quieren siempre llena, aunque con alguna actividad que pueden dejar para hacer otra que surja y crean que es mejor (no se entusiasma totalmente por ninguno por ese creer que puede haber algo mejor), no importándoles cancelar una cita por añadir otra.

Los menos sanos esto lo llevan al extremo, acabando siempre en reuniones o situaciones de hacer planes que no se llevan a cabo en ningún momento y que sólo sirve para perder tiempo y energía. Habitual dejar temas pendientes de resolución, relaciones personales y corazones rotos por su inconstancia e irresponsabilidad al salir huyendo de la ansiedad que les produce meterse en tantas experiencias que no pueden finalizar.

El 7 sexual. En su franja media es un buscador de continuas novedades y deseoso de experimentar, con una visión idealizada de la vida y de las relaciones. Cómo su interés abarca líneas muy diferentes, se sienten atraídos por aquello que consideran estimulante, ante lo cual no duda en ir a por ello con ilusión. Si es una persona, se imaginan futuras experiencias excitantes con ella y se entusiasman, transmitiendo ese interés y deslumbramiento, pero que en el caso de los 7 sexual insano es de corto recorrido; son cambiantes en sus predilecciones.

En esta franja insana rechazan el compromiso quedándose con la fase de enamoramiento que les encanta y cuando ya van perdiendo el encanto de lo novedoso, buscar nuevas relaciones. Están en un continuo buscar distracciones que enseguida les desilusiona provocándoles angustia, ansia e inquietud, metiéndose en un círculo sin sentido de volver a buscar novedades para no pensar en cómo se sienten. Ellos se provocan la inquietud que les mueve a actuar sin lucidez en su búsqueda de emociones cada vez más diferentes e incluso complicadas o peligrosas que les oculten su malestar o angustia. Podrían complicarse la vida con excesos que les pasen factura para siempre a ellos y a sus allegados ya que se vuelven más insensibles frente a los posibles daños colaterales.

Hasta ahora no lo he mencionado, pero el “pecado capital” del eneatipo 7 es la gula, eso sí, no entendida sólo para el acto de comer con desmesura.
Son insaciables en todos los sentidos por esa angustia, frustración, vacío y necesidad de cubrir con estímulos externos la sensación de carencia interior que tienen. Cuanto más sintieran de pequeños la falta de afecto (real o no, ellos la sentían) más insatisfechos viven de mayores, tengan lo que tengan.
Cada vez necesitan estímulos mayores y la mente ocupada para no sentir el vacío propio; tratan de estar excitados mentalmente para no topar con sus distorsiones emocionales.
Hasta que no se den cuenta que “la gula” es a la larga muy perjudicial porque cuanto más “tragan” sin medida, más ganas de comer tienen y más frustrados se sienten al ver que eso tampoco les satisface.
Parecido a los comedores compulsivos, que saben que les está trayendo problemas la acumulación de atracones indiscriminados, sintiendo ansiedad por ello que les hace volver a comer para intentar paliar la sensación de angustia… y así en un círculo vicioso que hay que cortar en algún momento.

La única manera de parar esta rueda es enfrentarse al propio ser, a esa sensación de vacío y al miedo que les produce (por eso escapan con distracciones físicas y mentales).
Tienen que entender que lo que ellos consideran normalidad, aburrimiento o monotonía, en realidad es la ansiedad que sienten porque no encuentran los estímulos exteriores para mantener sus sentimientos negativos escondidos y de esta manera mantener los pensamientos que les hacen sufrir controlados.


Son personas que no admiten consejos; experimentar por ellos mismos para reconocer que es mejor o peor en su vida es su filosofía. Hacerse conscientes de que les va a ser imposible experimentar todo lo que hay (¡imposible ni en 7 vidas!) y aprender de los que les puedan aportar, es otra de las formas de controlar esa falta de discriminación para acumular experiencias.

miércoles, 1 de febrero de 2017

El Ermitaño


Un día más cojo mi mazo de cartas de los Arcanos Mayores y pensando en lo bien que me encuentro, barajo y elijo una nueva carta para estudiarla y aprender de ella alguna enseñanza.
Alguna vez he elegido yo la carta sobre la que quiero aprender, pero esta vez dejaré que sea la salga en suerte. En esta ocasión me sale El Ermitaño, carta que no sé por qué siento que no es de las que más me gusta y acto seguido pienso que por qué no, que seguramente estudiándola descubriré por qué no me quiero enfrentar a ella.

Me resultaba como una carta triste, pero aprenderé a verla distinta cuando me moleste en descubrir que simbología y personalidad tiene este Arcano Mayor. A por ello, pero sin quedarme en la parte adivinatoria, que la voy a obviar.

Representa la búsqueda de uno mismo y de su potencial, de su verdadero yo que deja al personaje con su personalidad fuera del juego. Es el cambio de lo superficial por lo íntimo y para ello se busca el retiro y el silencio.

El Ermitaño nos indica la espiritualidad, la prudencia y la sabiduría interior que nos ayuda a ser pacientes y constantes. Es ejercer estas cualidades hacia uno mismo, es el encontrarse para amarse y así poder amar incondicionalmente al mundo.

Periodo de reflexión para encontrar el conocimiento, con distanciamiento de los demás o con recogimiento interior en los momentos que se buscan para estar solo.
Momento para olvidarse de lo material y superficial, por lo que en ocasiones puede ser que no se entienda esta actitud socialmente, ya que ahora nos movemos por un mundo de apariencias y máscaras, de potenciar personalidad y no persona.

Es un viaje hacia la sabiduría que nos deja escucharnos y descubrir a ese consejero interior al que no hacemos caso por el ruido en el que nos han enseñado a estar. Alejarse de este barullo exterior (si es necesario hasta físicamente) se impone y de esta manera llegar a lo que podemos llamar iluminación, reconocimiento interior, amor a uno mismo, sabiduría universal, consciencia de uno mismo...

El Ermitaño nos anuncia el momento para no hacer nada en concreto, para parar de estar en un continuo hacer y simplemente quedarse quieto a sentir y a observarnos para crecer ... tiempo para el disfrute íntimo. Nos dice que la soledad es una oportunidad en vez de una experiencia amarga; es darnos la oportunidad de mirar nuestra vida, nuestras emociones y sentimientos para poder entendernos y aceptarnos.

Nos sugiere estar en contacto con las emociones para que surjan de nosotros acciones constructivas meditadas y tranquilas, las que nacen desde nuestra verdad interior. Momento para valorar nuestra vida, observar quienes somos, para sentir e incluso escribir.

La labor que hacemos a través de la soledad y el reconocimiento de quienes somos nos hace valorarnos y por ende, valorar lo que nos rodea y a quien está con nosotros, incluso a la vida y la universalidad de donde procedemos.
Yo estoy bien, tranquilo y sereno consiguiendo estar de la misma forma en el exterior ; recogimiento que empodera, soledad que organiza, reserva del exterior para sacar el potencial interior para ser generoso.

En cuanto a la simbología de El Ermitaño, la linterna que sostiene muestra el camino hacia el logro.
La figura de una persona mayor simboliza sabiduría, madurez y buen juicio por todas las experiencias de vida ya tenidas, conocimientos que comparte convirtiéndose en nuestro guía interior con quien contactamos en la soledad. La barba y el reloj simbolizan lo masculino y lo femenino y la estrella de David que es amado por Dios. 
En la carta, él ya ha llegado a la cima, algo que nos dice que podemos alcanzar nosotros también.

Puede referirse a una persona o a una situación, en cualquier caso indica todo lo hablado anteriormente, bien alguien maduro en el que poder confiar por su experiencia y sabiduría o un momento para no precipitarse y tomar las cosas con calma y meditación.

También nos dice que al igual que nosotros podemos obtener la ayuda de alguien consciente y sabio, nosotros podemos ser esa misma persona para otros.

En ese mirar la vida, los acontecimientos pasados, nos abrimos a encontrar dónde están nuestras trabas para el avance. Que situaciones no resueltas interiormente nos impiden que vivamos nuestro presente libres de juicios y también de máscaras sociales, por lo tanto libres y capaces de conseguir nuestros propios logros.

El Ermitaño nos dice que lo que hagamos que nazca desde este gran momento de introspección y soledad, de conocimiento propio y sabiduría interior, será duradera, veraz y de confianza. Serán acciones orientadas a la estabilidad, la tranquilidad y la paz.

En numerología el 9 es el número de la paciencia y con sabiduría, bondadoso y amable. Se le denomina el número del maestro al igual que El Ermitaño, que transmite sus experiencias y conocimientos a aquellos que quieran escuchar que el interior de cada uno; es la gran capacidad que tenemos por descubrir.

Definitivamente, he cogido cariño a este Arcano Mayor, que pasa de parecerme serio, pesaroso o triste, a una gran persona capaz de generar bienestar, paz y tranquilidad. Un arcano amable este Ermitaño de aspecto mayor y bondadoso, con las huellas del tiempo en él que nos van dejando la sabiduría necesaria para querer conocernos y respetarnos. Me cae bien El Ermitaño y su mensaje de introspección y conocimiento propio.

Poesía sobre la figura de El Ermitaño