Pensamientos, palabras, obras y omisiones

Pensamientos, palabras, obras y omisiones
Pensamientos, palabras, obras y omisiones, … tal cual es la vida.
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jueves, 16 de mayo de 2019

I El Mago

          El Mago es un personaje que a mí me evoca la capacidad de hacer de lo que tenemos una fuente de felicidad y plenitud. Eligiendo y amando lo que hay sobre nuestra mesa y con la inquietud de vivir podremos tener  plenitud de vida. Capacidad y entendimiento de las situaciones nos aporta lo necesario para solventar cada momento. Todo lo podemos para tener una existencia satisfactoria, o al menos eso es lo que yo quiero entender con la carta de El Mago.

A parte de mi opinión, paso a describirla como dicen y coinciden los que entienden sobre tarot.

A la carta de El Mago la definen como carta positiva, de energía, creatividad, fortaleza, conocimiento, sabiduría y empeño o fuerza de voluntad. Todo esto nos desborda por los poros de la piel para poderlo utilizar de forma adecuada en nuestro beneficio. Algo mejor, más grande o diferentemente positivo está en nosotros para poder vivirlo y le acentúan esta connotación en un plano de actividad o profesión y económico, aunque en cualquier otro plano es igual de creativo y positivo El Mago.

Con su capacidad de organización, de elección de lo que es mejor en cada momento, El Mago tiene la capacidad de aprovechar las oportunidades no solo por tener todo lo que necesita a su alcance, también por tener los conocimientos para ello. Lo tiene todo: conocimientos, medios, oportunidad, control y energía para hacer de la situación, la mejor situación.


Es importante resaltar en El Mago su capacidad de control y de equilibrio en situaciones que pueden parecer o ser contradictorias. Con su diplomacia, habilidad y destreza puede mantener ese equilibrio que hace falta para sacar adelante cualquier situación que en principio está complicada para el resto, pero que El Mago saca adelante sin esfuerzo porque es conocedor de sus propias capacidades y recursos.

En un plano espiritual a El Mago se le asocia con los chamanes, adivinos o hechiceros capaces de conseguir lo necesario con sus secretos y rituales, de esta manera mantiene en equilibrio lo espiritual con lo material, el cielo y la tierra. En muchas representaciones tiene un sombrero en forma de infinito que representa la clarividencia, ese otro sentido que le otorga la conciencia que no viene del pensamiento, si no de ese inconsciente interior.

Si le queremos asociar a una profesión más de andar pisando tierra, El Mago representa a todo el mundo comercial e incluso de finanzas. Profesiones como las de comercial, vendedor, asesores financieros, viajantes, empresarios, publicistas, managers, … Todas estas actividades tienen en común que se necesita una gran capacidad de aprovechar las oportunidades de manera conveniente, que se necesita sabiduría e ingenio al igual la astucia de hablar y de convencer, además de una gran flexibilidad y mano izquierda para llegar a acuerdos, aplicando esa capacidad de mantener en equilibrio las situaciones.

Así mismo, por esa capacidad creativa que tiene y saber hacer lo que quiera con lo que tiene sobre la mesa, a El Mago también se le asocia con profesiones artesanas como orfebres, joyeros, tallistas y a mí me inspiran profesiones nuevas como reciclaje artístico creativo, manualidades creativas,…

Las palabras inspiran mucho y si algo le define a El Mago son lo que nos sugieren los siguientes términos: capacidad, dominio, equilibrio, independencia, destreza, acción, negociación, reflexivo, realización, potencialidad, profesionalidad, sabiduría, creatividad, elocuencia, sentido común, facultad, ingenio, habilidad, seguridad, confianza en sí mismo, voluntad… No cabe duda que es un Arcano Mayor muy recomendable y tener algo de la personalidad que nos transmite o tener a alguien a nuestro lado que la tenga, es algo a tener en cuenta.
Ciertamente El Mago nos dice que hay que hacer lo que se necesita hacer en cada momento sin postergaciones y para ello hay que estar comprometido dejando a un lado lo que nos distrae de lo que queremos conseguir y no perdiéndolo de vista. Tenemos con qué, sabemos cómo y podemos… es todo lo que nos hace falta para conseguir lo que queremos y para ser feliz con lo que tenemos.
 

¿Eres como El Mago o tienes a alguien de tu círculo próximo que lo es? Todos tenemos un poco de cada Arcano Mayor y seguro que tenemos por reforzar las capacidades de alguno de ellos; en mi opinión El Mago es un buen aliado si no llega al punto obsesivo de querer la perfección (¿tal vez del Eneagrama un 1 poco evolucionado? ) .


Si os apetece leer una poesía inspirada en El Mago      

viernes, 10 de mayo de 2019

El Loco

¡Qué personaje tan peculiar El Loco! Lo mismo le llaman también el caminante, que se le puede considerar el último de los Arcanos Mayores o el primero, incluso puede no llevar número, aunque en muchas ilustraciones aparece con el 0.

            El Loco es alguien distinto que ha decidido salir de los convencionalismos sociales, que no le importa el qué dirán de él y que camina hacia lo desconocido, un rumbo nuevo que no sabe dónde le lleva y la verdad, tampoco le importa. Solo quiere vivir otra historia, otra vida, otras experiencias… en definitiva, quiere experimentar una transformación y con sus cosas metidas en un pequeño hatillo (poco le importa lo conseguido hasta ahora, va a por algo nuevo y no puede llevar mucho lastre).

            Es un personaje inquieto el protagonista de la carta El Loco, impulsivo y agitado, donde no hay lugar a mucha reflexión, tan solo deja sitio a vivir lo que venga e incluso a hacerse el marginal o el solitario con tan de que le dejen en paz con los protocolos que rigen nuestra sociedad. Esta actitud le lleva en ocasiones a ponerse al borde del precipicio en un mundo que no está hecho para él tal y como lo ha vivido y lo ve.

            Su juventud le impulsa y la inocencia de la misma hace que los demás le vean como un incongruente cabeza de chorlito que no sabe para dónde va, viviendo en las nubes y habiendo renunciado al hogar que le daba calor, pero para él también ataduras. Estas críticas de los que le rodean para muchos viene representada por el perro que está a sus piernas mordisqueándole, aunque no puede impedir que él siga adelante con su mundo, su energía de vivir y sus ganas de probar y ensayar nuevas formas de vida, nuevas gentes, nuevos lugares (para otros este perro simboliza a su guardián que le cuida e impide que se ponga en un excesivo peligro sujetándole por las piernas).

            Quizás el ir vestido de bufón nos trae a la imagen el mundo del circo, de esos trotamundos que van por la vida con lo que tienen a cuestas y que no se arraigan a ningún sitio en concreto, simplemente llegan, lo viven y se van. Un mundo el del circo en el que a cada sitio que llega da su ilusión, su movimiento, su alegría y entusiasmo, lleno de magia, sueños, proezas físicas inalcanzables para muchos, sorprendentes y envidiables para otros.

            El Loco no es un loco sin más, es un personaje creativo e ilusionado, que se mueve más en otros mundos que no sean los físicos y materiales, que se atreve porque sabe que la vida le está cuidando y que no deja que las posesiones le impidan partir a vivir otros mundos. Es ese ímpetu de la juventud inocente y a la vez es la sabiduría de haber vivido y con ello, aprendido que lo material se tiene y se pierde, los amigos están y se van, que el hogar es el punto de partida pero no el final y que definitivamente, esta vida hay que vivirla con ilusión, energía, amor y aprender de los errores sin dramatizarlos y sin miedo a ellos.

Si os apetece leer más sobre El Loco, podéis leer una entrada que hice hace un par de años y que al leerla me complementa la visión que tengo ahora de El Loco.

            No dejemos perder El Loco que todos llevamos dentro y dejémosle salir, porque también es necesario para afrontar la vida con ilusión, es más, yo creo que las depresiones están presentes en esas épocas en las que hemos escondido a nuestro El Loco, puesto que es el que nos quita el lastre del pasado y nos da la alegría y la energía en el presente sin mirar qué nos deparará el futuro.

lunes, 27 de marzo de 2017

La Templanza en el Tarot



Esta vez voy a investigar sobre La Templanza, carta del Tarot que me inspira tranquilidad, equilibrio y armonía de primeras. 


La Templanza hace alusión a situaciones armónicas y a una actitud paciente y relajada, además de tolerante. Con una capacidad de adaptación y de dejarse fluir en las situaciones logramos mantener el control con respecto a las circunstancias de una manera cordial, dando la bienvenida a lo que nos acontezca con equilibrio y de manera lúcida.

Es la tranquilidad entre las dualidades, con la sabiduría de entender que los opuestos pertenecen al mismo hilo conductor en el cual pueden converger de una forma sosegada, aceptada y equilibrada.
Es el punto de cordura y de estabilidad dónde lo bueno y lo malo se unen; el cielo y la tierra, la mente pensante y los sentimientos, la inteligencia y la pasión, la sabiduría y el amor.

Es la estabilidad, el amor compartido en armonía, la amistad incondicional, las asociaciones cordiales y todas aquellas actitudes que logran mantener las buenas relaciones con los demás y con la propia naturaleza.

Cómo nos muestra el dibujo de este Arcano Mayor, es la continua circulación de situaciones fluyendo de una vasija a otra, el movimiento constante y tranquilo que da vitalidad y equilibrio. Es salir de los extremos para encontrar la cordura, la inspiración, la vitalidad y para mantener la calma interior entre los polos opuestos que manejamos; el ser y la personalidad.

No cabe duda que La Templanza es la carta que simboliza mejor la estabilidad mental, emocional y física.

Es la capacidad de templar y de mezclar las herramientas personales de las que disponemos de manera que no tengamos que desbordarnos por el exceso de unas en detrimento de las otras. 
Actuar con un grado de equilibrio alineando las fuerzas opuestas con la fuerza de voluntad tranquila y no delimitadora, con la paz que da la templanza y no con sacrificio que supone sentirse reprimido.

No es una postura simplista y cómoda, más bien es el resultado de dominarse a uno mismo y a las circunstancias para no perder el centro de equilibrio y estabilidad que auguran el éxito frente a las situaciones que nos puedan suceder.

Por lo tanto La Templanza nos habla de una etapa feliz, llena de amor, comprensión, ayuda y bienestar en un perfecto fluir con la vida inmersa en un continuo dar y recibir.

Fuera de esas situaciones excesivamente extremas, inconstantes porque la fuerza que llevan no es sostenible en el tiempo, La Templanza con su energía continua de paz y equilibrio nos aporta la estabilidad y la confianza interior necesaria para que nuestra salud humana (físico, emocional, mental, espiritual) permanezca inalterable.

Por lo que he leído, La Templanza le sigue a La Muerte no de manera casual, ya que después de ese cambio de vida que nos auguraba este Arcano Mayor (que algunos no nombran), es necesaria la mesura y la equidad, el entendimiento entre lo que somos y lo que en el exterior acontece. Así se adquiere el fluir con la vida de una manera auténtica, con lo cual nos permitimos superar los posibles contratiempos que siempre va a haber por este camino de vida.

Y yo considero el fluir con la vida al no crearse expectativas que normalmente no son reales, no pedir con exigencia que salgan las cosas como nosotros queremos y no calificar las situaciones como buenas o malas, ya que en toda situación hay una experiencia que vivir y de la que aprender para crecer. Con esa tranquilidad interior de que todo nos aporta y que cuando das recibes, la vida se va transformando en apaciblemente sencilla, coherente y tranquila, con alegría y libertad.

La Templanza nos insta a utilizar nuestra capacidad de esperar, la paciencia; no hay que hacer nada de manera precipitada, si no encontrar el momento adecuado. Descansa dejando que tu interior te guíe (y no tu reacción) y luego actúa de manera limpia, transparente y tranquila. Es afrontar los problemas de forma tranquila y calmada, sin precipitaciones y sin conjeturas sobre las situaciones y los posibles desenlaces fantasiosos que la intranquilidad y el miedo pueden urdir.
Esta es la forma sabia de actuar ; encuentra el equilibrio de la situación y luego actúa con la mente serena y desde tu verdad interior, sabiendo lo que haces y no dejándote llevar por impulsos arrebatados.

Si me pongo a pensarlo es muy coherente observar que evitar el conflicto no es cobardía, es la capacidad de entender que los opuestos son complementarios y de esta forma encontrar el punto de encuentro constante que aúne las dos fuerzas. Es aceptar que en ti las fuerzas opuestas no tienen por qué estar en conflicto, si no en colaboración y tolerancia.

La sombra no existiría sin la luz y a la inversa. La una no es nada sin la otra, forzosamente son complementarias y la una engrandece a la otra (cuanta más luz, la sombra se proyecta más clara y cuanta más oscuridad, más destaca un haz de luz).
Sin no hay silencio no se distinguen los sonidos y si no hay sonidos no apreciaríamos los silencios; utilizar los sonidos y los silencios de una forma armónica determinada produce el arte creativo de la música.

El mundo y la naturaleza funciona con fuerzas opuestas y complementarias para seguir su proceso vital; alianzas naturales que no se califican de buenas y malas, simplemente existen para beneficio de la propia vida en el planeta y como tal se aceptan.
De forma global la naturaleza practica la filosofía de La Templanza; algo se va y algo viene, alguien muere y alguien nace, algo sube y otro algo baja... no dramatizo, acepto, con tranquilidad dejo fluir y continuo la vida en ese fluir.

Entiendo que esto sea complicado de practicar ya que vivimos en una dualidad constante; o es blanco o es negro, amor/odio, físico/espiritual, bueno/malo, bonito/feo, normal/anormal ... todo es en competencia, el uno sobre el otro, mi verdad mejor que la tuya.
Habrá que hacer algo para poder pasar de ahí a la integración y a la comprensión de que unos no existiríamos sin los otros y que las situaciones tienen componentes diferentes e incluso opuestos y que en la búsqueda de equidad entre las partes, encontramos el discernimiento de lo que es la plenitud de vida en su perpetuo recomienzo y continuidad (a la vez).

Uno de los consejos de La Templanza es observar la situación en la que te encuentras y te genera conflicto; localiza bien cuáles son las circunstancias reales (no las que tú crees), mantén el equilibrio entre los dos extremos que hayas detectado y colócate en el centro porque es ahí donde no hay conflicto ni tensión. En muchas ocasiones, el mal visto camino del medio, es lo coherente.

Serena tu conflicto interno frente a las circunstancias que no entiendas, relaja la mente y calma la emoción; enfoca de manera diferente y más abierta la situación para desbloquear los puntos enquistados y desenreda los nudos con paciencia y tranquilidad.
Es importante comprender que no hay vencedores ni vencidos, éxito ni fracaso, que en todo existe un avance en el sentido global de nuestra propia existencia. Así que lo mejor es abandonar ese espíritu de lucha o enfrentamiento y de irse a los extremos impulsados por el ego que quiere ganar a costa al ser.

Mira la vida de una manera realista, ve el mundo tal y como es, después, baila a su son buscando la armonía y la paz con el momento, serenando la mente y dejando que tu ser interior aflore, neutralice y complemente las diferentes energías que se den.
Encontrar el equilibrio y la unión entre los opuestos que se complementan ; femenino y masculino, luz y oscuridad, muerte y renacimiento, silencio y sonido, calor y frío, la luna y el sol...en la búsqueda de esta unión tocamos con la parte creativa de nosotros mismos, es transformar el interior para que el exterior también lo haga.

Permanecer con uno mismo y reencontrarse con el alquimista interior capaz de alear o unir los opuestos creando un nuevo enfoque de la vida con el que actuar en favor de los encuentros, la armonía con los demás, la colaboración, las relaciones sinceras, la comunicación, el amor incondicional o la libertad. Un enfoque humanamente evolucionado, igualitario y conciliador.

La Templanza es la carta de sin prisa, carente de locas pasiones o emociones salvajes; está guiada por la calma, la reflexión, la tolerancia y la adaptación, facultades todas ellas necesarias para conseguir ese ambiente distendido (no hay fuerzas contrarias tensas que luchen por dominar), confiable (colaboración y entendimiento) y seguro (relaciones sinceras con uno mismo y con el entorno).

Para remarcar, más aún si cabe, el significado de este Arcano Mayor tan favorable para las relaciones humanas, paso a enumerar sus cualidades e invito a reflexionar sobre ellas y sobre la utilización que hacemos cada uno en nuestro a diario : moderación, alquimia, creatividad, colaboración, cooperación, comunicación, fidelidad, unión, amor compartido y correspondido, equidad, paciencia, mesura, autodisciplina, autocontrol, admisión, tolerancia, aceptación, aprobación, adaptación, consentimiento, adhesión, asunción, contemporización, recibimiento, serenidad, dulzura, gentileza, equilibrio, reflexión, progreso, apertura, evolución, creatividad, armonía, relaciones sólidas duraderas, trabajo en equipo, solidaridad, sociabilidad,...

En un plano un poco más espiritual, miramos hacia nuestro interior y encontramos en él las respuestas de vida y todas las cualidades antes mencionadas para poder evolucionar recuperando lo que en esencia somos, amor incondicional.
Confía en tu ser interior (http://lascosasquetieneeloisa.blogspot.com.es/2017/02/intuicion-o-voz-interior.html), él eres tú, es tu potencial para llevar una vida humana con tranquilidad y equilibrio, avance e inspiración. La justa unión entre tus energías físicas y espirituales, disfrute del cuerpo y del alma, alegría del ser individual y del ser global,... la unión armónica entre lo mundano y divino.
Prueba a desarrollar tu conciencia quizás desde esta perspectiva encuentres una nueva manera de enfocar tu vida que te llene de satisfacciones hasta ahora no experimentadas; un nuevo camino para construir, compartir y disfrutar. Nada más y nada menos es lo que La Templanza nos pone sobre la mesa. ¿Te animas a mirar tus lados opuestos y a unirlos guiado por lo que realmente eres? Todo un reto a descubrir, para mí, enormemente gratificante.


Si te ha gustado La Templanza, mira a ver si te gustan el resto de los Arcanos Mayores  

Si quieres leer más:
Templanza

Poesías dedicadas a La Templanza :

sábado, 18 de marzo de 2017

El Juicio cómo Arcano Mayor

De nuevo con otro Arcano Mayor para sorprenderme de que puede decirme; El Juicio.
Al ver la carta con esas personas desnudas saliendo de ataúdes y un ángel con una trompeta en mano, de entrada me recuerda a los sermones en los que nos inculcaron portarnos bien porque en el día del juicio final si no, nos iban a caer todos los castigos dolorosos del mundo mundial... de aquellos lodos, estos barros en el inconsciente que se me ha asustado con el dibujo. ¿Me volveré a sorprender con esta carta?

De entrada sí porque es una carta que representa triunfo y no castigo como mi mente tiene grabado. Es el logro final con un cambio necesario positivo que deja que los acontecimientos suceden cómo debe ser para el desarrollo personal en todos los sentidos. Es la recompensa de lo no recibido, la equidad, la aclaración de causas pendientes con evolución de vida.

Nos indica una renovación, un retomar un proyecto, una reconciliación muy profunda con uno mismo y también con los demás.
Momento de perdón y aclaración de situaciones para llegar a unos buenos acuerdos nuevos o renovados, sin culpabilidades y con la posibilidad de redimir el pasado liberándose de las opresiones mentales y emocionales de lo vivido.

Se superan y se olvidan los malos momentos, las ofensas, los recuerdos del pasado que nos atan. Sobre todo son las propias ataduras las que cortamos; sentimientos de culpa por errores cometidos.
Los "pecados" cometidos durante la vida se miran con amor e indulgencia para ofrecernos el perdón por lo que no hayamos sabido hacer mejor en cada momento.
De esta manera, perdonándonos, adquirimos la capacidad de perdonar a los demás las posibles "ofensas" que puedan haber cometido en nuestra contra, restableciendo vínculos personales, retomando relaciones, reconciliándonos con situaciones y emociones y viviéndolas de una forma renovada.

El Arcano Mayor de El Juicio, nos pone en la observación y el entendimiento de muchas experiencias vividas, de tal manera que al hacer una aceptación (que no conformarse) de que lo vivido ya está pasado y quedarnos con lo bueno que cada momento nos aportó, logramos continuar nuestro camino con mayor plenitud, armonía y felicidad.

Indica que las dificultades se acaban; los malos tiempos pasaron, así que solo queda lo bueno en adelante; todo lo que venga será para construir, para recuperar lo que se creía perdido, para retomar y finalizar o consolidar alguna cuestión de vida pendiente. No hay que temer a El Juicio porque es justo y viene en el momento adecuado aunque nos parezca inesperado, súbito y por ello nos de respeto e incluso miedo.

Este es el momento de tomar una importante decisión que marcará cómo se desarrollará en adelante tu vida. No tiene que haber dudas de este preciado y precioso cambio porque vienen como justos los frutos no recogidos y ahora es el momento de la compensación a través de El Juicio que dictamina que recuperaremos lo que merecemos.

De El Juicio en adelante todo funciona cómo debe ser y si es poniendo un final a relaciones o situaciones complicadas, llega ya el momento. Si es reconciliándose y llegando a nuevos acuerdos, de igual manera es el momento. Sea como fuere, es un Arcano Mayor que indica un cambio en positivo, un superar los problemas, un avanzar hacia un desenlace feliz y prolongado.
Es un cambio de rumbo importante y necesario, pero esta vez con unas buenas bases de vida, con una perspectiva positiva de las situaciones y sin lastres del pasado. Un empezar de nuevo pero no desde cero, si no con todo el bagaje del aprendizaje de vida que todas las situaciones nos han aportado. Sin duda alguna se retoma el camino acertado y correcto con esperanza y libertad.

El Juicio nos indica que ha llegado el momento de renovarnos y renovar nuestra situación porque la vida nos brinda resultados mejores que los obtenidos hasta ahora. Un giro muy decisivo y repentino ante el despertar de la llamada al cambio, ante El Juicio final que nos dictamina un antes y un después. Momento de aclarar el pasado destapando nuestras mentiras y las ajenas y ofreciendo el perdón y el olvido.
Un buen momento favorable que hay que aprovechar para rendir cuentas y empezar de nuevo. No hay que perder la oportunidad y hay que actuar porque el resultado siempre será para ir a mejor.

La imagen es muy clara; la resucitación de los personajes que salen de sus féretros (desnudos en representación que están sin nada como cuando se nace y empieza una nueva forma de vida) ante la presencia de un ángel que llama con su trompeta al despertar de una situación que ya no tiene sentido y reclama el levantarse perdonando y empezando de nuevo con una real comprensión que viene del alma, del ser mismo, por lo que es verdadera la reconciliación con uno, con las situaciones y las personas.

Este Arcano Mayor nos simboliza la oportunidad de recomenzar de nuevo, transmutando el pasado a través del perdón honesto. De esta manera se consiguen situaciones nuevas que resuelven las antiguas preocupaciones y reparan los daños. La ilusión y emoción ante los cambios que se avecinan auguran un camino armonioso, buenas amistades.

Palabras clave (en las que reflexionar) que identifican a este Arcano Mayor que es El Juicio: despertar, reforma, transformación, superación, cambio, resurrección, reconciliación, retomar, revolución, giro, modificación, reajuste, evolución positiva, adelanto, progreso, avance, mudanza, entendimiento, asimilación, acuerdos, olvido de lo malo, apaciguamiento, arreglo, calma, éxito, consolidar, finalizar, transmutar, resurgir, entendimiento, equidad de juicio, renovación, aclaración, renacimiento, resurgir, restauración...

Dale una vuelta a que puede haber en tu vida con lo que tengas que hacer un punto de inflexión y evolucionar hacia otro manera distinta de proceder, de pensar, de sentir. Reconciliación con uno mismo lo primero y retomar con amor incondicional hacia lo que somos y lo que hemos hecho y desde este punto, vivir y sentir el perdón que nos brindamos. Lo que no hagamos con nosotros no haremos con los demás, lo que somos capaces de aceptarnos de nosotros mismo y reconocernos (sea "bueno" o "malo"), es el baremo con el que hacemos juicio a los demás. Deja que sea el buen juicio que nos dice El Juicio que es necesario, el que te guíe.

No hay que dejar perder la oportunidad que viene de forma sorpresiva aunque merecida (no ha sido cuestión de suerte), llena de buenos resultados, ilusión y sin lugar a dudas, mejora de vida.
Es El Juicio, al que no hay que tener miedo porque es necesario, justo y recompensatorio. Sin duda alguna, un Arcano Mayor benevolente e influyente que nos dice que todo va bien si aceptamos el cambio imprescindible.


Poesía dedicada a El Juicio 

Si te gusta como veo la carta de Tarot de El Juicio y quieres saber de otros Arcanos Mayores  

domingo, 12 de marzo de 2017

La Muerte - Arcano Mayor



En esta nueva elección de carta me he encontrado al darla la vuelta con La Muerte; impresionante sobre su caballo blanco, erguida estandarte en mano y he pensado "¡bueno! contundente carta que dice que algo llega a su fin, que una situación muere" y lo curioso es que no me ha dado miedo pensar en que algo tiene que desaparecer para que entre en la vida algo mejor.


Me meto a investigar sobre este Arcano Mayor y a escribir mi parecer sobre en lo que hay que estar atentos o aprender; tengo curiosidad.

La verdad es que no nos enseñan a normalizar las muertes y me refiero a las muertes de situaciones tanto de relación personal, cómo de forma de vida, cambio de trabajo, etc. Estamos en la época de no hablar de la muerte porque nos asusta salir de nuestra zona de confort aunque no sea confortable.
De ahí que cuando la vida dice hasta aquí porque nosotros no lo decimos, es cuando La Muerte hace acto de presencia para cortar con todo aquello que no nos ayuda a seguir creciendo; no queda más que darle la bienvenida a La Muerte, al cambio, a lo desconocido y nuevo.

Es un mensaje liberador el que nos propone este Arcano Mayor; dejar atrás el pasado y lo que lleva (yo añadiría dando las gracias por lo vivido), dándole la bienvenida a lo que tenga que venir porque será para algo mejor que transformará nuestra vida y nuestra persona.

Esta carta me hace pensar que todos tenemos algún punto en nuestra vida en el que estamos atascados y no movemos ficha para cambiarlo; puede ser una forma de pensar, un trabajo, algo relacionado con el ocio, con las amistades, familia, pareja,... Pensar que en nosotros y detectar que hay que mover, romper, quitar, abandonar o dejar morir, es una muy buena reflexión para seguir avanzando.

A veces no será fácil, pero nadie dijo que las cosas tuvieran que ser difíciles. Esta forma de pensar quizás es otra de las que hay que matar; no nos tenemos que hacer la vida difícil y complicada, como tampoco tenemos que armar un drama porque haya cambios en nuestras vidas. Los cambios, los abandonos y las pérdidas son algo natural, lo no natural es que nos cree un colapso personal el cambio.

Aceptar el cambio con valentía, optimismo e ilusión porque es lo mejor que nos puede pasar en ese momento, es la manera de hacernos felices. Se trata de vivir el cambio y la muerte de una situación, adaptarse a la que venga y observar cómo nos encontramos y que aprendizaje hemos tenido que hacer,

Me cae bien este Arcano Mayor de La Muerte; tan solo nos mueve porque estamos atascados y viene muy rotunda y segura a llevarse por medio todo aquello que está caduco (aunque nosotros no lo veamos, o sí, pero no hacemos nada).

Es como cuando haces limpia en el trastero porque ya lo tienes lleno y no entra nada si no tiras unas cuantas cosas de las acumuladas en años y que seguramente no te sirven para nada (quizás tan solo para rememorar algún recuerdo).
Por mucho cariño que tengas a algunos trastos, por mucho que te entre esa nostalgia al verlos, tendrás que tirar algo del trastero para meter algo nuevo e importante.

Vivir el momento, dando gracias a lo pasado es una manera sana de desprenderte de objetos, ropas, situaciones o personas, con la esperanza y la ilusión puestas ante el nuevo escenario que la vida nos pone (o nosotros que con valentía hacemos un cambio).

La palabra que define a La Muerte y que a mí me gusta mucho es "transformación"; si nos vamos a que significa transformar, encontramos que es convertir una cosa en otra. El origen de la palabra es latino "transformare", compuesta por trans (a través, más allá de, de un lado a otro) y formare; cambiar de forma, la forma ir de un lado a otro.

Que la transformación sea comprendida y aceptada (nada que ver con la resignación) o aceptada para luego pasar a ser comprendida, es lo que nos va a hacer que vivamos las situaciones vitales normales de cambio con tranquilidad o con descorazonamiento.

Aunque pueda sonar contradictorio, La Muerte significa vida, otra clase de vida nueva y positiva.
El renacimiento a otra forma diferente de existencia; cómo una oruga se convierte en mariposa, como un feto se transforma neonato a través del nacimiento, como se deja la casa de los padres para emprender tu vida.

Renovar lo viejo, lo ancestral, lo que pueda ser un obstáculo o superfluo para una vida nueva y abundante en muchos sentidos y en cualquiera de las áreas de vida.

Me encanta la idea de dejar atrás lo que nos impide ir hacia delante, lo que frena y lastra. Me parece mucho más canso sostener una situación moribunda que concluirla para dar cabida a algo renovado por experimentar. Eso de "más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer", no siempre implica un buen vivir (quizás se inventó el refrán para mantenernos en nuestro sitio a través del miedo a lo nuevo).


No hay que resistirse al cambio de cualquier tipo (exterior o interior), aunque sea inesperado y pueda dar en un principio temor e inseguridad por desconocer que nos va a venir. Nos han hecho tan previsores que muchos no dejan espacio para lo espontáneo, lo imprevisto, lo nuevo; este es el aprendizaje que nos trae La Muerte.

Desapego de lo pasado, de lo atascado, de lo marchito para dar la bienvenida a lo nuevo, a la transformación. Limpieza de casa que nos deja ver claramente como estamos, quienes somos, que nos falta y que nos sobra, que nos ayuda y que nos impide, quién es compañero de viaje o quién es un impedimento para vivir todo lo que nos merecemos como seres infinitos en una vida humana limitada por el factor tiempo.

Parece ser que se nos olvida que solo son unos años de existencia como cuerpo físico humano, que cualquier día y en cualquier momento nuestra amiga La Muerte hará acto de presencia para marcar el final de esta etapa y el comienzo de otra diferente. Aprendamos a vivir la muerte (de lo que sea) como algo natural, positivo y necesario.

No hay que perder la ilusión porque el cambio está ahí para ser recogido con valentía y sobre todo si estamos pasando por un momento duro de vida o por "la noche oscura del alma" (San Juan de la Cruz).
Nota* Este enlace es interesante 

En todas las barajas de Tarot, aparece imponente La Muerte; dejando tras su paso o bajo sus pies cadáveres, pero si me voy en concreto a la carta de la baraja Waite (la que yo tengo), me encuentro con la figura del un esqueleto dentro de una armadura negra, encima de su caballo blanco y en el estandarte su número y una especie de símbolo (parecida al símbolo de los Rosacruz). No lleva ningún tipo de arma, sin embargo a sus pies cae lo mismo el clero, que reyes, niños o mujeres.
También aparecen dos torres (como en la carta de El Diablo) y en medio de ellas el sol brillante.

Para que se nos quede bien el concepto que nos quiere transmitir el Arcano Mayor de La Muerte, paso a enumerar una serie de palabras que la definen:
Transformación, transmutación, modificación, evolución, reajuste, variación, mutación, metamorfosis, reforma, cambio, reforma, renovación, transfiguración, conversión, mudanza, innovación, mejora, liberación, progreso, florecimiento, avance, superación.


Según más he ido leyendo de esta carta del Tarot La Muerte, más me gusta y eso que es una carta que en algunas barajas no lleva más que el número (por cierto, el 13), para que no se lea su nombre. También se la asocia con el signo zodiacal Scorpio (casualidad, mi signo) y con los planetas fuertes como Marte. Si quieres conocer mi opinión sobre otros Arcanos Mayores.
si quieres conocer otros Arcanos Mayores 
Poesía dedicada a La Muerte