Las trampas de nuestra vida

 Parece que la vida es la responsable de lo que nos ocurre y quizás en más de una ocasión nosotros no seamos responsables de acontecimientos "fortuitos" o "casuales" pero si somos responsables de las trampas de nuestra vida, es decir, de nuestro autosabotaje.

De entrada decir que soy de la opinión de que cada situación que vivimos sirve de aprendizaje personal si uno quiere y si no quiere, sirve para acumular la experiencia para ver si en la siguiente que nos ocurra parecido espabilamos. Incluso aunque hayamos aprendido parte de una lección de vida, como no la tengamos aprendida con sus matices, se nos repetirán situaciones en las que esos matices tengamos que detectarlos y asimilarlos.

El por qué nos es difícil cambiar algunas maneras de hacer o de ver las situaciones de vida, puede ser explicado de varias formas y una de ellas es a través de la neurociencia y el concepto que últimamente se conoce un poco más: neuroplasticidad.

La neuroplasticidad viene a decir en palabras sencilla y concepto corto, que el listo de nuestros órganos (el cerebro), tiene la capacidad de crear conexiones nerviosas durante toda su existencia (no solo cuando somos bebes o niños y estamos creciendo).

Vamos con la explicación formal: neuroplasticidad o plasticidad neuronal es la capacidad que tiene el cerebro para formar nuevas conexiones nerviosas en respuesta a la información nueva, a la estimulación sensorial, al desarrollo, a la disfunción o al daño.

Vamos, que el cerebro no es un órgano ya hecho y sin posibilidad de cambio, todo lo contrario, tiene capacidad de renovarse continuamente y de adaptarse ante nuevos estímulos externos y propios de cada uno. Añadiendo a esto, que se le puede entrenar para que esta neuroplasticidad sea mayor y que dependiendo de actividad mental hagamos en este entreno, las nuevas neuronas se multiplican con más intensidad en las distintas zonas del cerebro.

En el cuerpo es fácil de entender, Si trabajo los músculos de las piernas, me crecerán esos músculos, no los de los brazos ¿verdad?, si entreno los brazos no me crece el pectoral ¿verdad' y si entreno de una forma continua solo una parte de mi cuerpo y la otra no, la descompensación con el paso de los años será clara y evidente ¿verdad? ¡Pues así de sencillo con el cerebro y sus distintas zonas cerebrales!

Por eso hay gente muy resolutiva en un sentido y en otros incapaz de resolver, debido a que se centran, practican y potencian una de las zonas cerebrales.

Con la neuroplasticidad de soporte, se están estudiando las diferentes posibles soluciones  a enfermedades cerebrales de muchos tipos como las producidas por enfermedades degenerativas, lesión traumática, accidente cerebrovascular, anorexia, depresión, TDAH, trastornos emocionales....

Vamos, que está demostrado que se puede hacer más con este cerebro que nos pone las trampas de nuestra vida al tenerlo limitado en sus capacidades y sus potencialidades. Porque aunque seamos la pera limonera, aún podemos llegar a ser mejores, pero no como continua obsesión de vida de estar en mejora, si no como continua conciencia de que queremos vivir más felices y libres, con relaciones más sanas y menos conflictivas, con reacciones más tranquilas y menos dañinas.

Yo suelo decir a quien me suelta un "es que tú tienes suerte de ser tan positiva y alegre"...¿perdón?, esto no es suerte, esto es un trabajo diario de querer pensar en positivo, de leer en positivo, de dar la vuelta a la situación y ver en positivo. Y cuando digo trabajo diario, es trabajo diario para que mis "neuronas de la felicidad" "nazcan, crezcan, se reproduzcan y mueran".

Por lo visto y sin saberlo, he estado (y estoy) utilizando la capacidad de la neuroplasticidad con sus dos tipos; la positiva y la negativa.

La neuroplasticidad positiva tiene como función crear y ampliar las redes neuronales con información ya existente y la neuroplasticidad negativa es que elimina las redes que no se utilizan.

¡Qué bueno! Tenemos capacidad de quitarnos los malos pensamientos por no utilizarlos y de crearnos bienestar de vida creando pensamientos positivos.

Pues todo esto que la ciencia ahora confirma, unas cuantas filosofías de vida de hace unos cuantos (bastantes cientos) ya lo decían y ya lo sabían sin necesidad de aparatología de última generación, lo que pasa que lo que la ciencia no demuestra parece ser como que son cuentos para niños.

¡Y no espabilamos con esto! y mira que el transcurrir de la vida nos ha demostrado en ocasiones muy bien definidas que los que nos dicen que tenemos que pensar van por detrás de lo que es.
Yo creo que el tenernos desinformados y haciéndonos creer en limitaciones es una forma de esclavitud, porque de esa manera no discrepamos y nos dejamos mantener donde estamos sin dar problemas (la imagen del elefante atado a una estaca pequeña me viene a la mente).

Bueno, me voy del tema y no quiero; sigo con la idea que tenía para esta entrada y que no es otra que llegar a la reflexión de que si sabemos que nuestro cerebro funciona de una manera bastante errónea por utilizarlo reiteradamente de manera poco efectiva, si sabemos que esas conexiones neuronales han sido implantadas por nuestros "domadores" tan poco atinados en muchas ocasiones (sociedad, padres/madres, educación, cultura local, etc.) y si sabemos que nosotros mismos nos ponemos las trampas de nuestra vida por ello,... ¿por qué le damos la importancia que le damos a lo que pensamos y somos hasta capaces de pegarnos de tortas por tener la razón?¡si nos mentimos a nosotros mismos!

Yo por eso cada vez más pienso que cada cual que haga lo que quiera/pueda, porque ninguno estamos exentos de estar en lo correcto o en lo equivocado.

Tan patente es que las trampas de nuestra vida son difíciles de descubrir que el tema ha sido estudiado y debatido en múltiples ocasiones y hay una teoría de Jeffrey Young en la que nos habla de ello (teoría de las trampas vitales); incluso se han desarrollado estrategias terapéuticas para afrontar las 11 trampas vitales que son comunes en las conductas más destructivas (definidas por la experiencia a través de la práctica clínica).

Voy a acabar esta entrada con cuatro conceptos sobre neuroplasticidad que te rellenen un poco más la información que te he dado, ahora bien, el tema es muy interesante y esto solo son pinceladas.

1.-Neuroplasticidad reactiva; aquella que sirve para resolver cambios ambientales de corta duración.

2.-Neuroplasticidad adaptativa; es la que modifica de una forma estable una ruta de conexiones neuronales que se genera con la memoria y el aprendizaje.

3.-Neuroplasticidad reconstructiva; la que permite recuperar parcial o totalmente las funciones perdidas.

4.-Neuroplasticidad evolutiva; los patrones de conexión se modifican por la influencia ambiental que predomine al sujeto.

Es evidente que tenemos recursos para solventar impedimentos externos, barreras mentales, implementar nuevas maneras de afrontar las situaciones y crear unos cambios permanentes que nos dejen vivir con un grado de independencia o por el contrario de adaptación. Existen muchas herramientas al alcance de todos (y más en esta época) y muchos profesionales a los que recurrir para poder evitarnos parte de las trampas de nuestra vida que nos impiden vivir con un bienestar mayor esta vida terrenal.